Morelia, Mich. Purépechas de Arantepacua incendiaron ayer dos vehículos de carga en Casa Michoacán, la residencia oficial del gobierno de Alfredo Ramírez Bedolla, horas después de haber derribado con una de las unidades el portón de acceso principal.
Los indígenas intensificaron este lunes sus protestas para exigir una reunión con el mandatario morenista y autoridades federales, en busca de apoyos para infraestructura educativa y de salud para su poblado.
Los comuneros de Aratepacua, localidad enclavada en el municipio de Nahuatzen, en la Meseta Purépecha, desde las nueve de la mañana arribaron en tres autobuses a Casa Michoacán, ubicada en el Periférico Sur de Morelia; se encontraron con que los accesos estaban cercados con vallas metálicas. Agentes antimotines permanecían en el interior del inmueble.
Un grupo de purépechas retiró las vallas y las utilizó para bloquear uno de los sentidos de la vialidad, mientras que otro contingente robó un camión repartidor de la empresa Lala que usaron para derribar el portón metálico del principal acceso a la residencia oficial.
Ya por la tarde, alrededor de las 19:00 horas, incendiaron dos camiones repartidos de las empresas Lala y Sabritas, justo en el acceso a Casa Michoacán, lo que provocó temor entre habitantes y automovilistas del sur de la ciudad.
Según los inconformes, la comunidad de Arantepacua exigía una reunión con autoridades estatales y federales para acelerar la conclusión de la construcción de un Hospital IMSS-Bienestar, de la Unidad Deportiva, un nodo de la Universidad Michoacana y la Escuela de Artes y Oficios.
Ramírez Bedolla adelantó que las obras que demandan los indígenas continúan ejecutándose de acuerdo con los tiempos programados, por lo que calificó como injustificada su protesta.